Amor propio, ¿Egoísmo o Salud?

Amor propio, ¿Egoísmo o Salud?: Asistir a una consulta terapéutica de entrada, no es fácil. En mi caso fue hasta que toqué fondo, pareciera que la vida no nos deja otra alternativa, iniciar no es sencillo, pero continuar y comprometernos es aún más difícil.

Hay veces que tenemos la ilusión o el pensamiento mágico que con 2-3 sesiones será suficiente comprender toda una vida, décadas llenas de eventos que significamos muchas de las veces de forma dolorosa. Entiendo también que no nos va a tomar el mismo tiempo reconciliarnos con nosotros, sin embargo, son muchos temas los que traemos arrastrando.

Mollis me sonríe y me dice: Me da gusto que continúes aquí, recuerda que el compromiso es contigo misma, por eso el que veas por tu salud mental, emocional y seas tu prioridad ya es un logro, ¡Reconócetelo!

Todos tenemos conductas aprendidas. En mi caso aprendí que mi valor dependía de dedicarme en primer lugar a servir a los demás, en segundo y en tercero.

Siento que es genuino que disfruto sirviendo a mi familia, no siento que me pese, reconozco que, si deje a un lado muchas cosas que antes disfrutaba o lo que yo quería hacer, pero al final soy mamá y esposa, eso fue lo que aprendí. Quizás fui mamá muy joven y no me dio tiempo.

A pesar de disfrutar servir, sigo con este vacío interior y hoy que mis hijos ya no dependen tanto de mí, debo confesar que no sé que sigue. Ellos son los que le dan alegría a mi vida. Puedo llenarme de actividades, pero no me siento plena.

Piensa que siempre puedes elegir tu propio camino, no sé si en contra o a favor de lo aprendido, pero lo más sano es que tú lo elijas de forma consciente, con base en quién eres, qué es lo que quieres.

Es correcto que desde muy temprana edad vamos aprendiendo lo bueno, lo malo, lo que está bien visto, lo que debo hacer para que me acepten o que hacen otras personas que desde mi perspectiva veo que aceptan.

El ser humano por naturaleza, incluso por sobrevivencia, busca ser aceptado por el grupo, requerimos este sentido de pertenencia. El conflicto viene cuando actuamos en contra de nuestro ser, vamos hacia una dirección, queriendo ir en contra, decimos que “Si” cuando queremos que sea “No”.

Estas contradicciones son las que van generando fricción, se va destruyendo nuestra autoestima, no somos nuestra prioridad porque anteponemos lo que creemos, nos dará la aceptación del grupo.

El servicio es la vocación universal a través de la cual nos realizamos, le damos trascendencia a la vida, sin embargo, esto conlleva el dar lo mejor de nuestro ser, ¿Has escuchado que nadie puede dar lo que no tiene?, ¿Qué podrías darle a los demás que no te das a ti primero?

En la educación de los hijos lo que marca no son las palabras, sino el ejemplo, los actos, ¿Qué puedes enseñarles de amor, si tú a ti no te amas, si tú a ti no te pones como prioridad? Son discursos huecos, vacíos.

No es egoísmo, no es narcisismo como se cree, es amor propio.

En este proceso de conocimiento de ti misma, irás descubriendo quién eres, debajo de esas conductas aprendidas.

Las siguientes sesiones revisaremos cada una de las esferas que componen el Proyecto de Vida, para que puedas elegir como servir a los demás a través de ser tu mejor versión. 

Gracias por leer: Amor propio, ¿Egoísmo o Salud?